J.R.R. Tolkien
No siempre brilla el oro ni todo el que anda errante va perdido. Lo viejo, cuando es fuerte, no se amustia ni en la raíz profunda entra la escarcha. De las cenizas subirá una llama, asomará una luz entre las sombras. El hombre sin corona será rey; de nuevo forjarán la espada rota.