Me tienen sin cuidado los odios y las alabanzas de los hombres que pertenecen a la raza de los explotadores. Quiero rebelar a los pueblos. Quiero incendiarlos con el fuego de mi corazón. Quiero decirles la verdad que una humilde mujer del pueblo ¡la primera mujer del pueblo que no se dejó deslumbrar por el poder ni por la gloria! aprendió en el mundo de los que mandan y gobiernan a los pueblos de la humanidad.