Recuerdas aquel beso sin tiempo, y aquella boca fresca, tan cerca, y aquella red de curvas desnudas, y aquella muda y ciega vergüenza, y aquel desconocido gemido, y aquel temblor de tierra despierta, y aquella nueva senda de seda, y aquellos balbuceos Romeo, y aquella risa inquieta Julieta. Recuerdas.