Siempre me siento feliz. ¿Sabes por qué? Porque no espero nada de nadie; esperar siempre duele. Los problemas no son eternos, siempre tienen solución. Lo único que no se resuelve es la muerte. La vida es corta, por eso ámala, sé feliz y siempre sonríe, solo vive intensamente. Antes de hablar, escucha. Antes de escribir, piensa. Antes de herir, siente. Antes de rendirte, intenta. Antes de morir, vive.
Esta frase no es de William Shakespeare, y buscando por internet tampoco he podido dar con el autor verdadero, pero es mejor dejar la autoría en "Anónimo" que atribuirlo equivocadamente a Shakespeare.